Las murallas desconocidas que venció Marcos Yaroide
Escrito por Juan Bautista el 07/09/2015
Marcos Yaroide, quien fundara 1999, con Juan Carlos Rodríguez, el mejor dúo cristiano de baladas que se recuerde en el país: Tercer Cielo, combinación vocal que llenó una época de la canción cristiana, es un personaje que ha tenido que enfrentar murallas, chismorreos y bloqueos que ha tenido desde su propia fe, donde es rechazado por los sectores más conservadores y fundamentalistas.
Con voz de registro único y cristiano de trayectoria limpia e inspirada capacidad compositiva, pese a las embestidas, Marcos Yaroide es ahora un líder indudable de la canción de fe.
Marcos Yaroide ha tenido que pelear en silencio y en muchos frentes, la mayor parte de los cuales se han dado desde el seno del sector conservador y tradicional de su propia iglesia, que dogmáticamente rechaza su cultivo de la balada pop, su vestuario a la moda al tono de la juventud de hoy.
La resistencia interna que ha enfrentado, la peor de todas, a este buen cristiano y mejor artista tiene episodios que nunca habrán de ser contados, y a los que ha respondido con altura y coherencia con su labor pastoral e interpretativa.
Le critican casi todo: su forma de vestir (indudablemente moderna), sus cortes de pelo, le cuestionan su pastorazgo de la Iglesia Cielos Abiertos, y hasta duda arrojan sobre el manejo de fondos de su templo.
Yaroide se ha limitado, a predicar mediante su canto y su palabra, a manejarse con apego a las escrituras y a supervisar con detalle el manejo de los fondos de su iglesia.
Los fondos generados por su concierto Luz en las Tinieblas, no han sido para su beneficio personal. Todo se ha dedicado a la obra pastoral que gerencia.
Dotado de una imagen juvenil, pese a sus 40 años, abierto a los nuevos tiempos que llaman a evangelizar en el código actual y moderno, Marcos Yaroide, es además un profesional de la música y la composición, que de haberse dedicado a la canción popular internacional, montado en la singular u caracterizada voz de acento metálico, seria individualmente millonario. Pero ha preferido el camino estrecho, ese que no comprenden ni asimilan los sectores evangélicos más arbitrariamente apegados a la tradición.
Sobre el concierto
¿Qué debía mediar para que este hombre, ofreciera dos horas de concierto, con 25 canciones y ni siquiera agua tomara?
Había una unción. Más que el arte musical de excelente factura, lo que se sentía era esa conexión de tanta gente que vino a adorar y que llego a hacerlo por medio de una música de calidad en su producción técnica y de elevadas notas en el plano de su espiritualidad.
El concierto Luz en las tinieblas, que produjo René Brea en el Teatro Nacional fue un atrevimiento que logró éxito al sorprender por la inusual combinación que logró con intérpretes que incluyeron desde la educada voz de la soprano clásica Nathalie Peña Gomas, hasta el músico urbano Mozar La Para, pasando por Niní Cáffaro, Miriam Cruz, Sexapeel y Fernandito Villalona. Algunos actuaron en forma virtual gracias a la tecnología, ya que el cambio de fecha por el paso de la Tormenta Erika, les impedía estar por compromisos de presentaciones acordadas.
Con el respaldo de un productor profesional y sensible, con una música atrayente y actualizada, con la fuera de sus temas.
El público se sintió tocado, tomado por el mensaje estructurado por un profesional de la música que sabe proceder para obtener un buen producto.
Vestido con elegancia y a la moda actual, el que estaba en el escenario era un pastor consciente de su papel, no asimilado por todos en las iglesias, pero claro en sus metas: evangelizar y llevar la Buena Nueva, por medio de su capacidad, su creatividad como compositor y su voz, singular y envolvente.
Marcos Yaroide es un cantante y compositor dominicano que hizo su debut como solista en 2006 con su primer álbum “Cielos Abiertos”, del cual se desprende el sencillo “Todo se lo debo a él”.
Yaroide se sabía que estaba en su “momentum”.